Terapia para la ANSIEDAD
La ansiedad se mete en tu día a día sin pedir permiso. Te cuesta concentrarte, duermes mal, el corazón se acelera sin motivo y sientes un nudo constante en el pecho.
Es como vivir con una alarma encendida las 24 horas. Desde fuera puede parecer exagerado, pero tú sabes que no lo es: te bloquea en el trabajo, en tu vida personal y hasta en lo más sencillo.
Con la terapia psicológica aprenderás a identificar qué activa esa alarma, calmar tu cuerpo y recuperar la seguridad que ahora sientes perdida. Paso a paso volverás a disfrutar de la tranquilidad que mereces
Terapia para el ESTRÉS
Vives con el cuerpo en tensión: te irritas por cualquier cosa, duermes mal, comes a destiempo y sientes que no llegas a todo.
El estrés empezó siendo una respuesta normal, pero se ha quedado encendido como un acelerador pegado al suelo.
Así termina afectando a tu salud, tu trabajo y tus relaciones.
En consulta trabajaremos con un plan práctico para bajar la activación física, ordenar tu día a día, aprender a poner límites y recuperar el sueño y la concentración. Paso a paso, volverás a sentir calma y control.
Terapia para la DEPRESIÓN
Te levantas sin energía, todo cuesta el doble y lo que antes ilusionaba ahora te deja indiferente. No es pereza: es apatía, cansancio, cambios en el sueño o el apetito y esa sensación de estar desconectado de ti y de los demás.
En terapia trabajaremos para frenar los pensamientos que te hunden, recuperar hábitos que te sostengan y volver a sentir motivación y disfrute en tu día a día. Paso a paso, saldrás del bloqueo y recuperarás impulso.
Terapia psicológica para el DUELO
Perder a un ser querido, una relación o un proyecto vital deja un vacío que parece imposible de llenar. El duelo es un proceso natural, pero cuando se alarga demasiado y sigues atrapado en la tristeza, la soledad o la apatía, se convierte en una carga que te impide avanzar. Dormir mal, aislarte o revivir los recuerdos una y otra vez son señales claras de que necesitas apoyo.
Con la terapia aprenderás a vivir el duelo de una forma más sana, a integrar la pérdida y a recuperar poco a poco la energía para volver a sentir serenidad y sentido en tu vida.
La relación ya no se siente segura ni cercana: aparecen celos, distancia, planes por separado y una sensación de desgaste. Te preocupa el impacto de una posible separación —sobre todo si hay hijos—, pero también seguir así.
Problemas de comunicación en la relación
Más que “discutir”, el problema es cómo habláis: el tono sube, os interrumpís, os defendéis antes de escuchar, dais por hechas interpretaciones o intenciones y evitáis temas sensibles hasta que explotan… para luego volver una y otra vez al pasado.
En terapia de pareja trabajaremos para bajar la tensión, recuperar el vínculo y acordar nuevas reglas de juego: regular emociones, escuchar de verdad, bajar el escudo, expresar necesidades con respeto y cerrar acuerdos realistas que se mantengan en el día a día.
Uno puede dar el primer paso, pero para que funcione ambos deben implicarse. La relación puede volver a ser un lugar seguro.
Celos patológicos
Los celos pueden aparecer en cualquier relación, pero cuando se vuelven desproporcionados el día a día se convierte en un infierno: reproches, vigilancia, discusiones por cualquier detalle y una desconfianza que lo arrasa todo. No es amor, es miedo a perder y necesidad de control.
En terapia aprenderéis a entender qué hay debajo de esos celos, a gestionar la inseguridad y a reconstruir la confianza con límites sanos. La relación puede volver a ser un lugar seguro para ambos.
Dependencia emocional
Cuando tu bienestar depende por completo de tu pareja, el miedo al abandono lo invade todo. Llamadas constantes, necesidad de aprobación, ansiedad si no sabes qué hace o con quién está… La dependencia emocional no solo genera sufrimiento en ti, también desgasta la relación.
En terapia trabajaremos para reforzar tu autoestima, recuperar tu autonomía y aprender a disfrutar de la pareja desde la libertad, no desde la necesidad.
TERAPIA PARA ADICCIONES
Cuando el consumo deja de ser una elección y se convierte en una necesidad, la vida empieza a girar en torno a la sustancia.
Alcohol, cannabis, cocaína, tranquilizantes o incluso el tabaco acaban robando tu salud, tu energía y tus relaciones.
Al principio parece bajo control, pero con el tiempo aparece la dependencia: más tolerancia, más consumo, más consecuencias.
(Aquí debajo encontrarás un breve retrato de cada droga y cómo la terapia
puede ayudarte a salir de la adicción).
Adicción al alcohol
El alcohol suele empezar como una forma de relajarse o socializar, pero poco a poco se convierte en una necesidad diaria. Cuando bebes para dormir, soportar el trabajo o escapar de los problemas, ya no es ocio: es dependencia. Y con ella llegan las discusiones en casa, los problemas económicos y los daños en la salud.
Con la terapia aprenderás a manejar la ansiedad sin necesidad de beber, recuperar tu energía y reconstruir relaciones más sanas. Paso a paso, volverás a sentir que tienes el control de tu vida.
En terapia trabajaremos para reforzar tu autoestima, recuperar tu autonomía y aprender a disfrutar de la pareja desde la libertad, no desde la necesidad.
Adicción al cannabis y hachís
Empieza como algo “inofensivo” para relajarte o poder dormir y termina en un hábito diario difícil de soltar. Aparecen apatía, falta de motivación, problemas de memoria y concentración; a veces también ansiedad o paranoia. Si sientes que sin fumar nada tiene sentido, y si gran parte del día piensas en fumar, es un signo claro de dependencia.
En terapia aprenderás a reducir el impulso de consumo, manejar la ansiedad, recuperar energía y motivación y volver a descansar de manera natural. Paso a paso, volverás a disfrutar de tu vida sin depender de ninguna sustancia.
Adicción a la cocaína
La cocaína promete energía y euforia, pero a cambio destroza la salud, tu bolsillo, las relaciones, tus proyectos – rendimiento en el trabajo y la estabilidad personal. Lo que empieza como algo puntual termina en hábitos de fines de semana y al final en necesidad diaria. Después llegan las mentiras, la fatiga, el insomnio, la irritabilidad y un deseo que no deja de aumentar.
Con la terapia aprenderás a romper el círculo, manejar la abstinencia y recuperar el control antes de que el daño avance. No estás solo: se puede salir. Muchos lo han conseguido y no tienen nada de especial que tú no tengas.
Terapia de adicción al tabaco
Empieza como algo “inofensivo” para relajarte o poder dormir y termina en un hábito diario difícil de soltar. Aparecen apatía, falta de motivación, problemas de memoria y concentración; a veces también ansiedad o paranoia. Si sientes que sin fumar nada tiene sentido, y si gran parte del día piensas en fumar, es un signo claro de dependencia.
En terapia aprenderás a reducir el impulso de consumo, manejar la ansiedad, recuperar energía y motivación y volver a descansar de manera natural. Paso a paso, volverás a disfrutar de tu vida sin depender de ninguna sustancia.
Adicción a tranquilizantes (ansiolíticos/benzodiacepinas)
Empezaron ayudándote a dormir o a calmar la ansiedad… y ahora los necesitas para casi todo. Cuando intentas bajar la dosis aparecen insomnio, nervios, temblores o irritabilidad. La tolerancia sube, el miedo a la abstinencia te paraliza y sientes que no puedes salir.
En terapia trazaremos un plan seguro y gradual para reducir la medicación, manejar la ansiedad sin fármacos y recuperar tu equilibrio. Si es necesario, coordinaremos el proceso con tu médico para hacerlo con todas las garantías
Con la terapia aprenderás a romper el círculo, manejar la abstinencia y recuperar el control antes de que el daño avance. No estás solo: se puede salir. Muchos lo han conseguido y no tienen nada de especial que tú no tengas.
OTRAS ADICCIONES SIN DROGA
No todas las adicciones tienen que ver con sustancias. También hay conductas cotidianas —jugar, comprar, internet, trabajo, comida o sexo— que, poco a poco, se convierten en una trampa. Cuando pierdes el control, la actividad se vuelve obsesión y aparecen problemas familiares, laborales, económicos y de salud.
En terapia identificaremos la raíz psicológica, pondremos límites claros y aprenderás a relacionarte de otra forma con lo que hoy te domina. No esperes a que haya consecuencias graves: se puede frenar a tiempo.
En terapia aprenderás a reducir el impulso de consumo, manejar la ansiedad, recuperar energía y motivación y volver a descansar de manera natural. Paso a paso, volverás a disfrutar de tu vida sin depender de ninguna sustancia.
(Aquí debajo encontrarás un breve retrato de cada caso específico: juego, internet/redes, compras, trabajo, comida y sexo.)
Adicción al juego online y apuestas (ludopatía)
Las apuestas deportivas, tragaperras o casinos virtuales parecen inofensivos, pero poco a poco lo controlan todo: dinero, tiempo y vida personal. Lo que empieza con “solo unos euros” termina en deudas, discusiones en casa, aislamiento y problemas en el trabajo. Siempre piensas que recuperarás lo perdido… y siempre acabas perdiendo más.
En terapia aprenderás a cortar el impulso de apostar, ordenar tus finanzas y reconstruir rutinas y relaciones. Paso a paso, volverás a sentir que mandas tú, no el juego.
En terapia trazaremos un plan seguro y gradual para reducir la medicación, manejar la ansiedad sin fármacos y recuperar tu equilibrio. Si es necesario, coordinaremos el proceso con tu médico para hacerlo con todas las garantías
Con la terapia aprenderás a romper el círculo, manejar la abstinencia y recuperar el control antes de que el daño avance. No estás solo: se puede salir. Muchos lo han conseguido y no tienen nada de especial que tú no tengas.
Adicción a internet y redes sociales
Lo que empieza como entretenimiento se convierte en un hábito que lo ocupa todo. Pasar horas en juegos online, engancharte al scroll sin fin de redes sociales o mirar el móvil nada más despertar, son señales claras de dependencia. Poco a poco se resiente tu sueño, tu concentración, tu tiempo, tus estudios, tu trabajo y hasta tus relaciones más cercanas.
Cuando no puedes conectarte aparece ansiedad, irritabilidad, incluso a veces esa necesidad constante de validación con likes o notificaciones. Tu vida gira en torno a una pantalla y sientes que no puedes soltarla.
En terapia aprenderás a poner límites reales, recuperar tu tiempo y volver a disfrutar de relaciones y actividades que te llenen de verdad. Paso a paso, dejarás de sentir que internet y las redes deciden por ti.
En terapia identificaremos la raíz psicológica, pondremos límites claros y aprenderás a relacionarte de otra forma con lo que hoy te domina. No esperes a que haya consecuencias graves: se puede frenar a tiempo.
En terapia aprenderás a reducir el impulso de consumo, manejar la ansiedad, recuperar energía y motivación y volver a descansar de manera natural. Paso a paso, volverás a disfrutar de tu vida sin depender de ninguna sustancia.
(Aquí debajo encontrarás un breve retrato de cada caso específico: juego, internet/redes, compras, trabajo, comida y sexo.)
Adicción a las compras (online y tiendas)
Comprar parece inofensivo… hasta que se convierte en un impulso que no puedes frenar. Pasas horas mirando ofertas, llenas el carrito “por si acaso” y, tras la euforia, llega la culpa. No llegas a fin de mes, tiras de tarjeta de crédito, a veces pides anticipos en el trabajo y las discusiones en casa se multiplican. Empiezas a esconder tickets o bolsas y sientes que el dinero se escurre entre tus manos.
En terapia aprenderás a manejar la ansiedad sin comprar, frenar el impulso (también en rebajas y “chollos”), ordenar tus finanzas y recuperar el control con hábitos claros y sostenibles. Comprar volverá a ser una elección, no una necesidad.
En terapia aprenderás a cortar el impulso de apostar, ordenar tus finanzas y reconstruir rutinas y relaciones. Paso a paso, volverás a sentir que mandas tú, no el juego.
En terapia trazaremos un plan seguro y gradual para reducir la medicación, manejar la ansiedad sin fármacos y recuperar tu equilibrio. Si es necesario, coordinaremos el proceso con tu médico para hacerlo con todas las garantías
Con la terapia aprenderás a romper el círculo, manejar la abstinencia y recuperar el control antes de que el daño avance. No estás solo: se puede salir. Muchos lo han conseguido y no tienen nada de especial que tú no tengas.
Adicción al trabajo
Trabajas más horas de las necesarias, revisas el correo en fines de semana y vacaciones, te cuesta desconectar y sientes culpa cuando descansas. Lo que parecía esfuerzo acaba en estrés, insomnio, irritabilidad, aislamiento y conflictos en casa. Tu vida personal se va encogiendo.
En terapia aprenderás a poner límites reales, organizarte sin autoexigencia extrema y recuperar hábitos de descanso y ocio sin culpa. Podrás rendir bien en el trabajo y tener vida fuera de él. El trabajo no debe ser una cárcel.
Cuando no puedes conectarte aparece ansiedad, irritabilidad, incluso a veces esa necesidad constante de validación con likes o notificaciones. Tu vida gira en torno a una pantalla y sientes que no puedes soltarla.
En terapia aprenderás a poner límites reales, recuperar tu tiempo y volver a disfrutar de relaciones y actividades que te llenen de verdad. Paso a paso, dejarás de sentir que internet y las redes deciden por ti.
En terapia identificaremos la raíz psicológica, pondremos límites claros y aprenderás a relacionarte de otra forma con lo que hoy te domina. No esperes a que haya consecuencias graves: se puede frenar a tiempo.
En terapia aprenderás a reducir el impulso de consumo, manejar la ansiedad, recuperar energía y motivación y volver a descansar de manera natural. Paso a paso, volverás a disfrutar de tu vida sin depender de ninguna sustancia.
(Aquí debajo encontrarás un breve retrato de cada caso específico: juego, internet/redes, compras, trabajo, comida y sexo.)
Adicción a la comida
Atracones, picar a todas horas, comer a escondidas o sentir culpa después… son señales de una relación adictiva con la comida. Lo que debería nutrir se convierte en refugio para la ansiedad, la tristeza o el vacío, generando un círculo de descontrol y malestar.
En terapia aprenderás a identificar qué dispara esos impulsos, manejar tus emociones sin recurrir a la comida y recuperar una relación sana y equilibrada con la alimentación. Comer volverá a ser un placer, no una carga.
En terapia aprenderás a manejar la ansiedad sin comprar, frenar el impulso (también en rebajas y “chollos”), ordenar tus finanzas y recuperar el control con hábitos claros y sostenibles. Comprar volverá a ser una elección, no una necesidad.
En terapia aprenderás a cortar el impulso de apostar, ordenar tus finanzas y reconstruir rutinas y relaciones. Paso a paso, volverás a sentir que mandas tú, no el juego.
En terapia trazaremos un plan seguro y gradual para reducir la medicación, manejar la ansiedad sin fármacos y recuperar tu equilibrio. Si es necesario, coordinaremos el proceso con tu médico para hacerlo con todas las garantías
Con la terapia aprenderás a romper el círculo, manejar la abstinencia y recuperar el control antes de que el daño avance. No estás solo: se puede salir. Muchos lo han conseguido y no tienen nada de especial que tú no tengas.
Adicción a la pornografía y al sexo
El acceso ilimitado a la pornografía y la búsqueda constante de sexo pueden convertirse en una obsesión que lo invade todo. Pasas horas frente a la pantalla, lo piensas gran parte del día y tu relación de pareja o tu vida social se resienten.
Aparecen problemas de concentración, pérdida de interés por otras actividades, gastos ocultos, aislamiento y, sobre todo, culpa por no poder controlarlo.
En terapia aprenderás a identificar qué dispara el impulso, recuperar el control, fortalecer tu autoestima y vivir la sexualidad de forma sana y equilibrada, sin que te domine.
Informes psicológicos
Un informe psicológico es un documento profesional que recoge de forma clara y detallada el resultado de una evaluación.
A través de entrevistas, observación y pruebas especializadas aporta evidencia objetiva sobre aspectos psicológicos o emocionales que no siempre son fáciles de demostrar.
Puede ser necesario en muchas situaciones: bajas laborales por ansiedad o depresión, dificultades escolares, procesos de traslado en el trabajo, informes médicos complementarios o para documentar un estado psicológico general.
Elaboro informes rigurosos, comprensibles y adaptados a tu caso, para que tengas claridad y respaldo donde más lo necesitas.
Terapia psicológica online
Si no puedes acudir a consulta en Fuerteventura, la distancia no será un problema.
Con la terapia online recibirás la misma atención profesional desde casa, sin desplazamientos y con eficacia comparable a la presencial.
Solo necesitas un ordenador o móvil con buena conexión y un espacio tranquilo.
Cómo trabajo en terapia psicológica
La psicoterapia no es solo hablar: es un proceso estructurado para entender qué te ocurre y aplicar herramientas prácticas que funcionen en tu día a día. En cada sesión definimos objetivos claros, medimos avances y ajustamos el plan para que progreses paso a paso.
Mi objetivo es que te sientas acompañado y seguro, resuelvas el problema que hoy te preocupa y cuentes con recursos para prevenir recaídas. Terapia útil, clara y orientada a resultados.
Puede ser necesario en muchas situaciones: bajas laborales por ansiedad o depresión, dificultades escolares, procesos de traslado en el trabajo, informes médicos complementarios o para documentar un estado psicológico general.
Elaboro informes rigurosos, comprensibles y adaptados a tu caso, para que tengas claridad y respaldo donde más lo necesitas.
En terapia aprenderás a identificar qué dispara esos impulsos, manejar tus emociones sin recurrir a la comida y recuperar una relación sana y equilibrada con la alimentación. Comer volverá a ser un placer, no una carga.
En terapia aprenderás a manejar la ansiedad sin comprar, frenar el impulso (también en rebajas y “chollos”), ordenar tus finanzas y recuperar el control con hábitos claros y sostenibles. Comprar volverá a ser una elección, no una necesidad.
En terapia aprenderás a cortar el impulso de apostar, ordenar tus finanzas y reconstruir rutinas y relaciones. Paso a paso, volverás a sentir que mandas tú, no el juego.
En terapia trazaremos un plan seguro y gradual para reducir la medicación, manejar la ansiedad sin fármacos y recuperar tu equilibrio. Si es necesario, coordinaremos el proceso con tu médico para hacerlo con todas las garantías
Con la terapia aprenderás a romper el círculo, manejar la abstinencia y recuperar el control antes de que el daño avance. No estás solo: se puede salir. Muchos lo han conseguido y no tienen nada de especial que tú no tengas.